Hagamos ahora un breve recorrido por las músicas que encontraremos durante el viaje a través de los 5 continentes: 1ercontinente:Europa. Nuestro viaje nos llevará partiendo de Carcastillo a través de Francia e Italia. Las diversas músicas Europeas tienen mucho en común, aunque cada región, distrito e incluso comunidad tengan su propia música y estilo. Este es un fenómeno que se produce en otras áreas geográficas del mundo donde las relaciones entre pueblos vecinos pueden ser más o menos grandes, no existiendo por lo general fronteras musicales abruptas. Las canciones narrativas son importantes, así como las de amor, ceremoniales, las relacionadas con la agricultura y las humorísticas. La música de baile en muy importante, aunque esto es común a todas las músicas folklóricas del mundo. La instrumentación es muy rica y variada pudiéndose dividir en :1º: Instrumentos simples comunes a muchas culturas musicales como: sonajeros, flautas de madera, pitos. 2º: I. llegados a Europa en épocas más o menos lejanas como: gaita, violin, oboe, banjo. 3º: I. propios de cada cultura Europea y 4º el más importante: I. tomados de la música culta como: violin, clarinete, guitarra, trompeta etc. Precisamente una característica de la música folklórica de Francia e Italia es la estrecha relación de ésta con la culta, donde ciertas canciones y danzas son originarias de la música culta medieval.A continuación pasaremos al 2º continente: Africa: donde visitaremos Túnez, Libia y Egipto. Aquí comienza la música panislámica, producto

  de la expansión del islam a partir del siglo VII desde su origen en Arabia, y que más o menos influenciada por elementos autóctonos, en este caso sobre todo bereberes, vamos a encontrar en lugares tan remotos como Indonesia. La mayor parte de la música panislámica es puramente vocal, y son muy típicas las canciones de boda, de amor, cuentos épicos, danzas en fila. Los instrumentos más comunes son: la flauta recta (qasaba), el violín (nabab), el ´ud (laúd árabe en sus distintas versiones), del que deriva el laúd occidental, la gaita, el oboe, el clarinete doble. Como instrumentos de percusión más comunes encontraremos el pandero y el tambor de una sola piel.
Atravesaremos el canal de Suez para entrar en el 3er continente: Asia, por Oriente Medio, visitando Jordania, Siria, quizás Irak, Líbano y Turquía. Todos estos países están dentro de la tradición musical panislámica, aunque sobre todo Turquía tiene rasgos especiales derivados de su origen centroasiático, de donde emigraron a la Turquía actual a partir del siglo X. Aquí podremos ver a los famosos derviches, aunque también

se dan en Siria, que danzan constantemente en circulo hasta entrar en trace, al son de la flauta recta  llamada nay.
Volveremos a entrar en Europa a través de Grecia   
 

 donde conviven un tipo de música muy melódicade corte occidental junto con otra muy influenciada por los más de 4 siglos de dominio Turco. EnBulgaria admiraremos las famosas “voces Búlgaras” y en Rumanía el trepidante ritmo de su música. En todos estos países la riqueza instrumental es muy grande, con gran influencia del cercano Oriente, por ejemplo las gaitas que contra lo que se suele pensar provienen de Oriente. Siguiendo nuestro viaje, y después de atravesar la pequeña Moldavia, llegaremos a Ucrania y Rusia donde la polifonía, o canto de distintas notas a la vez, está muy extendida, la expresión máxima son los famosos Cosacos del Don, y donde también podremos admirar sus orquestas de balalaicas o sus coloristas danzas. Volvemos a entrar en Asia por las repúblicas centroasiáticas de origen turco de Kazakhstán, Uzbekistán, y Turkmenistán. Al estar situadas en la zona de las rutas comerciales que unían Oriente y Occidente( la ruta de la seda), han tenido la influencia de diversas culturas. La música está particularmente influenciada por la Persa y la Arabe( concretamente varios centros de la teoría musical musulmana estuvieron aquí), pudiéndose encontrar instrumentos musicales del Cercano Oriente como los laúdes, flauta recta, clarinetes dobles, el pandero. Son muy aficionados a las grandes narraciones épicas e incluso a improvisar versos, al estilo de los bertsolaris. De aquí pasaremos a Irán, cuya cultura musical aunque se la considera dentro de la tradición musical panislámica, conserva rasgos propios anteriores a su  islamización (siglo VII): el setar, laúd de 4 cuerdas, es diferente del de los árabes; también la flauta recta y los tambores(tombak, y daf )

En Irán encontraremos un predecesor del piano occidental: el santur. Continuaremos el viaje por la península Indostánica (Pakistán, India y Bangladesh), que desde un punto de vista musical la podemos dividir en música karmática en el sur de la India, que presume de ser la más autóctona, y la música Indostana que comprende Pakistán, Bangladesh y la India Septentrional,

  que estaría influida por las invasiones arias (1000 a.d.c.) y las más relativamente recientes invasiones musulmanas (Siglo XIII). Aunque algunos  instrumentos varían, los conceptos fundamentales de ambas músicas son los mismos. La música de la India pasa por ser de las más expresivas y variadas que existen. Nos encontraremos con el pungi (clarinete doble con lengüetas usado entre otros por los encantadores de serpientes),  y con el famoso conjunto musical formado por el sitar (laúd Indio) y los tambores tabla y tambura. Podremos admirar la gran variedad de danzas existentes, y dado que el ritmo es muy importante encontraremos mucha variedad de tambores. A continuación visitaremos el Asia sudoriental, musicalmente llamada la cultura del gong, por la gran utilización que se hace de ellos:Myanmar(antigua Birmania),

 , Tailandia, Laos, Vietnam, Camboya, Malasia y Singapur. Sus músicas son una mezcla de componentes autóctonos con influencias de Indonesia, China, India, y últimamente de occidente. En todas ellas hay una gran riqueza de instrumentos profusamente adornados, con predominio de conjuntos de percusión: el pi phat de Tailandia, aunque también los hay de cuerda: los mahori para acompañar obras de teatro, de viento: el khaen (precursor remoto del órgano occidental). Entre los instrumentos encontraremos tubos sonoros, trompetas, flautas de pan, el arpa birmano, y toda suerte de instrumentos de percusión: gongs, platillos etc. Veremos también bailes muy sugerentes por los movimientos de pies y del torso acompañados de delicados ejercicios con las manos. De Singapur pasaremos a Indonesia, que si bien participa de muchas características de la música del Asia sudoriental, ha creado una mezcla de estilos musicales debido a la influencia del islam, siglo XII, a la posterior influencia de portugueses, holandeses e ingleses. Su expresión más característica y conocida es la música gamelán (del javanés gamel=golpear), que es un conjunto compuesto en esencia por instrumentos de metal , en los que los kendang (tambores) llevan el ritmo, aunque también suele haber cantantes. En cada zona de Indonesia podremos admirar sus propios gamelanes, siendo los más conocidos los de las islas de Java y Bali. A continuación entraremos en el 4º continente: Oceanía a través de Australia, donde nos encontraremos dos tipos de músicas totalmente contrapuestas entre sí: por un lado el rico legado de  viejas baladas y danzas llevadas a Australia principalmente por colonos angloeuropeos a partir del siglo XVIII, pero también por colonos griegos, italianos o indios, y por otra parte la  de los aborígenes australianos, uno de los pueblos más antiguos de la humanidad, donde la música juega un papel muy importante dentro   de su cultura  y a lo largo de toda su vida. Aquí

  podremos admirar y oir el digeridoespecie de trompa hecha con una rama hueca de eucalipto, y que puede medir hasta 2 metros de largo. ,
Y dando un gran salto en el mar entraríamos en el 5º continente: América. Desde los tiempos de la llegada de los Europeos a América a finales del siglo XV, la música de América ha ido perfilándose a través de préstamos, formas autóctonas o reinterpretaciones. Las aportaciones, a veces antagónicas de Europa, Africa a través de los esclavos, y las civilizaciones autóctonas, han originado una música y una danza de una riqueza y una variedad tal que ha tenido gran influencia en todos los estratos  de la música del siglo XX. El recorrido lo iniciaremos por Chile, punto de llegada desde Australia, Argentina y Uruguay, donde su música folklórica, excepción hecha de la zona mapuche al sur de Chile, tiene mucho que ver con géneros importados de la península ibérica y adaptados a la idiosincrasia americana; ahí están la zambra, las danzas del pañuelo, el gato etc. El famoso tango tendría además connotaciones de otras partes de Europa. En Brasil, su baile más conocido: la samba, en su origen es un baile congoleño ejecutado por esclavos negros de esa procedencia. Lo mismo cabría decir de otros bailes brasileños, mezclas de ritmos africanos y peninsulares. Siguiendo nuestro viaje hacia el norte encontraremos la zona andina formada por: Bolivia, Perú y Ecuador, donde el substrato musical aborigen quechua y aymara es muy intenso, aunque en las costas de Perú y Ecuador la música tiene un alto componente africano. Para los amerindios la música, investida de poderes sagrados, ha estado permanentemente vinculada al cosmos y a los ciclos solares y lunares. En el género más popular el huayno, que es muy conocido desde el norte de Argentina hasta Ecuador, y que se canta tanto    en quechua y aymara como en 

 castellano, encontraremos instrumentos autóctonos como flautas de pan, kenas, charangos, tambores, mezclados con otros occidentales como violines, arpas, mandolinas. Siguiendo más al norte, los rasgos afroamericanos están muy marcados en algunos aspectos de la música folklórica de Colombia y Venezuela, sobre todo en las zonas costeras. En los estados de América Central: Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Salvador, Honduras y Guatemala, vamos a encontrar tradiciones musicales muy variadas, producto de las influencias de los indios aborígenes, de los antiguos esclavos negros, (por ejemplo la marimba, instrumento nacional de Nicaragua es de origen africano), y de la cultura musical hispana. Sin embargo en Mejico, aunque los indios aborígenes conservan en cierto modo sus estilos musicales nativos, encontraremos una cultura musical basada sobre todo en la tradición hispana, con coreografías y numerosas danzas mestizas. Es en el Caribe donde la influencia africana es muy notoria, y además de la tradición folklórica hispana: Cuba, República Dominicana, Puerto Rico, encontraremos también raíces británicas y francesas: Jamaica, Trinidad, Haití.( La influencia autóctona no existe, pues los caribes fueron exterminados hacia finales del siglo XVI). Continuaremos el viaje por EEUU y Canadá donde la influencia Europea, en general, es muy grande sobre todo la británica y en el este de Canadá también la francesa. Sin embargo los esclavos negros han dejado una huella muy importante que se hace patente  en ritmos tan de actualidad como el jazz o el rock. La música aborigen está confinada en las reservas, manteniéndose más o menos sin mezclas.
Y de aquí iniciaríamos el salto por el mar otra vez hacia Europa, para llegar a Irlanda, donde la música tiene tal importancia en la cultura que su emblema nacional es un arpa. Nuestra última etapa pasaría por Gran Bretaña y Francia para llegar de nuevo al punto de origen: Carcastillo.