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Crónica de : Jose E. Santacara
 

Crónica  A1
Fecha: 2.008-02-14
 
Kilómetros desde Carcastillo: 10.474
Transmitida desde : Kogaha-Komborodougou                                  Inicio-Marruecos-Sahara Occidental
                                                                   
Latitud   : 9º 20' N
Longitud: 5º 26' O

 

      Queda ya un poco lejano aquél 20 de Noviembre del año pasado cuando inicié este viaje alrededor de África, y ya va siendo hora de que la 2ª crónica sobre África (la 1ª la escribí antes de salir) vea la luz. Estoy en Komboro (norte de Costa de Marfil) desde hace casi 4 semanas, a la espera de un paquete con piezas esenciales para Ibiletxe para continuar el viaje, pero de momento está en paradero desconocido. Sea como sea enseguida partiré para Abijan (la capital), pues al parecer se podría encontrar allá, aunque no sé dónde. Hasta el momento he tenido muchas averías, demasiadas: Ibiletxe está algo cansada (pero espero llegue al final), aunque como de costumbre ha tenido la delicadeza de no dejarme nunca en la carretera, o si la avería era grande, de tenerla fuera de ella. La cerradura, perdida de gasoil, avería del alternador, problemas en la suspensión y en una barra de apoyo, problemas con una rótula, y la más importante: rotura del tensor de la correa de distribución y casi rotura de la correa lo que hubiese significado la pérdida del motor. Pero justo había arrancado, iba a baja velocidad y esto impidió que el motor se rompiese. Ahora mismo voy con la correa de un Toyota (menos mal que al menos llevaba el tensor viejo de repuesto), y aunque Ibiletxe anda más o menos bien (un poco fuera de punto), estoy esperando la nueva (así como otro tensor) para continuar con seguridad.  La parada en Komboro estaba prevista, aunque lógicamente no tan prolongada: aquí está Celes, una misionera de Carcastillo, trabajando junto con otras en un dispensario-maternidad, y no me puedo quejar de la acogida que he tenido. Habitación individual con ducha y agua caliente, me preparan la comida, y he podido ir con nativos "senufos" a poblados para grabar sus costumbres y conocer su forma de vida. Entre reparaciones propias y las de la casa donde estoy el tiempo ha ido pasando rápidamente, y hasta ha dado tiempo a que lleguen los calores después del viento harmattán que viene del desierto, y que hemos tenido hasta hace poco. La informática-electrónica también me está dando mucho trabajo, pues el nuevo ordenador viene con el sistema operativo Vista, y algunos programas o van mal o ni siquiera los puedo instalar. Además, probablemente debido a un fallo de uno de los elevadores de tensión, 4 alimentadores se han roto (al menos he podido arreglar tres).
     Por lo demás poco a poco me voy metiendo en la realidad Africana, donde Mauritania es la transición entre el África blanca y la negra. A las dos les une las grandes desigualdades sociales que se ven, aunque es a partir de Marruecos donde estas se agudizan si cabe más. Se vive en estrecha "armonía" con la suciedad y la pobreza, y las comidas de la mayoría de la población tienen un escaso valor nutritivo que les hacen agarrar todo tipo de enfermedades, o tener pocas defensas ante la malaria etc. Las gentes están emigrando de forma masiva a ciudades que no tienen las suficientes   estructuras   para

 

acogerlos, el chabolismo más cutre va en aumento, y hay barrios (por llamarlos de alguna manera) que da pánico verlos. Algunas carreteras están en buenas condiciones , pero la gran mayoría no son sino pistas que supongo en época de lluvias serán casi impracticables. Cuando entré en Mali me pareció salir de las tinieblas, con ciudades en Guinea Conakry como Kundara con más de 100.000 habitantes y sin luz!, y en lugares donde la hay con 100-120 voltios sobre 220, apenas es operativa. Aquí mismo, Internet la tengo en Korhogo a una hora de viaje, y hemos estado 10 días sin ella a pesar de tener casi 1 millón de habitantes! Bien es cierto que es producto de la guerra civil terminada hace 2 años, aunque en África siempre hay una excusa para que algo no funcione.
    Pero  el viaje en sí compensa de todo esto: tener el privilegio de ver ciudades como Fes, Marrakesh, Tombuctú, el país Dogón, las montañas de Guinea Conakry, el río Niger, estar en la fiesta del cordero, verlos bailar y cantar es algo que no se olvida.
   África es el continente de las linternas; en cuanto llega la noche estas se ponen a funcionar pues las calles e incluso las casas permanecen casi en la oscuridad. Se necesitan para ir al baño, para andar por las calles, para visitar al vecino, y es a la luz de ellas (o del fuego) donde África recobra la claridad y se empiezan a contar en Peul, en Wolof, en Hassaniya, en Pular, en Bambara, en Diula, en Senufo y en tantas otras lenguas las historias, los cuentos y las leyendas que le dan vida, porque lo más importante en África es la transmisión oral. Mientras, el idioma francés se va a dormir para al día siguiente volver a recuperar un cierto protagonismo en la vida diaria.
    El Africano ríe mucho, y bromea mucho entre sí; en general son amables, aunque no hay que confiarse demasiado ( por hacerlo ya me quitó el minidisc en Senegal un policía que llevaba a dedo, y en Dakar los plásticos de los intermitentes mientras dormía). Supongo que en esto algo tendrá que ver las grandes carencias que hay. Sin embargo también están los que te invitan a comer a casa porque has tenido un detalle con ellos. 
    No quiero terminar sin comentar una noticia: hace unos días, por fin el nuevo Gobierno Federal Laborista de Australia ha pedido perdón oficialmente a los Aborígenes Australianos, por los sufrimientos y humillaciones que han tenido que soportar del hombre blanco durante más de 200 años. Era el único gran organismo que quedaba por hacerlo. Vaya mi felicitación para mis queridos Aborígenes, y que esta medida no sea simple retórica, y  sirva para mejorar sus condiciones de vida, sobre todo de la llamada "generación perdida", desde que el hombre blanco les robó hasta el alma.
Vaya esta crónica en homenaje a Mariaje: aurrera Fernando eta familia.

 

Como podréis ver he cambiado bastante la estructura de la web (la de las crónicas es la misma) y la página de inicio pues ahora son 2 viajes (el ya realizado y el presente por África) en la misma web. Tardaré algún tiempo en dejarla toda bien y operativa pues hay que actualizar los enlaces de todas las crónicas, y eso lleva tiempo. También he puesto el número del teléfono satelital por si alguien quiere llamar: domingos de 12 a 1 hora de allá, y la dirección email,  (ya sabeis la copiais y me escribis desde vuestro servidor).  Y por favor: no me mandéis adjuntos (a no ser que sea necesario): Internet es lenta, y no tengo tiempo de abrirlos.

 

Camino de África
    Son
las 11,30 de la mañana, y después de una noche casi sin dormir haciendo los últimos preparativos, hoy 20 de Noviembre del 2.007 doy comienzo a este viaje que a través de desiertos, sahel, sabanas, selvas, algo de frío y mucho calor, lluvias y sequías, guerras declaradas y guerras todavía sin declarar, miseria de muchos y riqueza de unos pocos, y sobre todos malas carreteras, me llevará a dar la vuelta a este continente olvidado, que fue la cuna de la humanidad pero que hoy apenas cuenta en el panorama mundial. Al iniciar el viaje no puedo por menos de acordarme de aquél 26 de Junio del 2.003 cuando di comienzo a la vuelta al mundo; aunque siempre me han gustado los retos, y vivir en el filo de la navaja, entonces entre otras tenía la preocupación lógica de iniciar por primera vez un gran viaje, o mejor dicho el Viaje con mayúsculas, y no tenía muy claro cómo me comportaría ante él, y aunque confiaba en mí mismo, ni   si sería capaz de llevarlo a cabo. Sin embargo pronto me "acomodé" a él, a sus ritmos cambiantes y a sus reglas no escritas. Aprendí a tener paciencia, a procurar no ponerme nervioso ni en los momentos más difíciles, a aceptar las cosas como venían y pensar que de una equivocación vendría algo interesante, a no enfadarme conmigo mismo, a adaptarme a las formas de conducción , a respetar culturas y distintas formas de vivir sin cuestionarlas, a agradecer lo que me daban y no  exigir, a intentar vivir en cada lugar según sus costumbres, a vencer la soledad a base de tener la cabeza siempre "ocupada",  en

 

una palabra: pasase lo que pasase a intentar ver la botella medio llena, y a sobrevivir. El viaje me enseñó que si bien el objetivo de dar la vuelta al mundo era importante, lo realmente importante era el viaje en sí mismo. Y con todas estas premisas se fue alargando y alargando, y el año y medio- 2 años previstos inicialmente se convirtieron en casi 3 años. Cierto que cuando salí no pensaba que escribiría 56
              Cerca de Zagora: empieza el desierto
crónicas con casi 500 páginas, ni que recopilaría tanta música, ni que haría tantas fotos y grabaría tantos videos. Desde luego esta mañana no tengo esa preocupación o la tengo de otra manera: ya sé lo qué es hacer un gran viaje (espero que este dure aproximadamente un año), y conozco

 

mis recursos para sobrevivir y superar las dificultades, pero seguramente África, por su situación actual,  va a ser más complicada y en principio arriesgada. Además al no haber conseguido un todo terreno vuelvo a hacer este viaje con mi fiel Ibiletxe, y aparte de no ser muy apropiada para África (tampoco lo era para dar la vuelta pero lo consiguió), está algo cansada. Ya no es la que inició el otro viaje hace casi 4 años y medio, y aunque sale razonablemente preparada, seguro que cuando se vea en situaciones complicadas protestará a su manera, y con razón. Confío en que no lo haga a menudo, y que como de costumbre sea capaz de salir por su propio pie (rueda) de esas situaciones. Esta vez llevo muchas más latas de conservas que me ha dado la conservera Bajamar de Carcastillo, y por contra mucha menos ropa: al final del otro viaje me acostumbré a lavar más a menudo en gasolineras, fuentes, ríos etc. y siempre se puede comprar ropa usada muy barata.
Madrid
   
Con
todos estos pensamientos para cuando me quiero dar cuenta ya estoy en Madrid. Voy a recoger la videocámara que he comprado por Internet (la anterior tuvo la delicadeza de romperse después de terminar el viaje), y después a despedirme del amigo Sito con una buena cena.
Al día siguiente recojo la nueva tarjeta para el teléfono satelital, estoy con Tomás otro viajero empedernido de África, y en el taller de un amigo suyo levantamos la delantera de Ibiletxe unos 7 cm, que le vendrán muy bien para las carreteras Africanas.

 

 

 

 

              
                                                                                                    Recorrido por Marruecos y Sahara Occidental
 

 

 

Én Navalmoral de la Mata tengo otra parada obligatoria, y a continuación  rumbo a Algeciras donde ya me están esperando los amigos Ricardo y Marta
Algeciras
    
Aquí
son las últimas compras, los últimos emails de despedida y los últimos momentos antes de pasar a África. Marta me trae el "costo" (un paquete con comida), y Ricardo me lleva al puerto que tan bien conoce después de muchos años trabajando en una compañía de ferries, a
sacar el billete para Ceuta. Le encanta meterse por todos los rincones, saludando a sus antiguos compañeros de trabajo!.
Á
frica: Ceuta
    Hoy 26 de noviembre llego por fin a África, pero el suelo que piso no pertenece a ningún país Africano: un

 

anacronismo histórico me lo impide. Me resulta curioso que siendo Ceuta una ciudad donde la mayoría de la población habla Castellano y Árabe-Marroquí, estén casi todos los
rótulos solamente en Castellano, como queriendo obviar la realidad. Por lo demás Ceuta es una ciudad de provincias a caballo entre dos mundos, que vive mucho precisamente de esa realidad.
Marruecos
   
La
frontera está a un par de km. de la ciudad de Ceuta, y según me voy acercando van aumentando los grupos de Marroquíes que se amontonan en ella con sus compras hechas en Ceuta, y que también están a la caza de algún turista. A pesar de no necesitar visado las formalidades de Ibiletxe llevan un rato, y ya al atardecer me encuentro conduciendo por Marruecos; a 20 km de la frontera

 

aparece el primer pueblo, y como es de noche decido parar al lado de la carretera a dormir.
Con la luz del día veo que la agreste costa es muy bonita: al fondo está Ceuta, y en las verdes faldas de las montañas se ven diseminados pequeños pueblos y caseríos. Ciertamente el paisaje es muy parecido al dejado en Algeciras.
Tánger
    
Sigo
bordeando la costa y llego a Tánger, una ciudad cosmopolita que debe su prosperidad a su puerto internacional. Aquí venían a vivir artistas, bohemios, aventureros, era la gran puerta de África para los Europeos,
y la ciudad moderna tiene un claro sabor colonial.
Continuo camino de Mekne para ir a Fes, y al pasar  por Kaar-el-Kebir (Alcazarquivir) me viene a la memoria  el rey

 

 

 

de Portugal Sebastián pues  aquí murió en 1.578. Con el se acabó la expansión Portuguesa en el norte de África, y empezó la leyenda que lo situaba vivo en algún lugar del continente: incluso se especulaba que estuviese reinando en Etiopía.
Fes
  
Fes
, en especial su medina, es otro Patrimonio Mundial de la Humanidad. Al meterme por la medina me voy haciendo un mapa pues son todo estrechas callejuelas
caprichosamente trazadas con miles de pequeños comercios, algunos tan increíblemente pequeños que justo cabe el dueño. La medina, una de las mayores que existen, está situada en una pequeña colina rodeada por la parte nueva de la ciudad.

 

Rabat
    La
idea primitiva era ir hasta Marraquesh bordeando las montañas del Atlas, pero cambio de opinión y decido antes visitar Rabat y Casablanca.
      Rabat es la capital política de Marruecos y se nota. Está bien cuidada, su centro tiene un aire muy Europeo, y malas lenguas dicen que hay mucha policía de paisano para
                                Torre Hassan
expulsar a todo Marroquí considerado indeseable y así "limpiar" la ciudad. Voy al fastuoso mausoleo de Mohamed V, 1º monarca desde la independencia en 1956, y a su lado veo la majestuosa torre de Hassan, construida en el siglo XII por los almohades, y que pretendía ser la más alta y grande del Islám. Nunca se terminó y un gran terremoto la

 

dañó, pero todavía con sus más de 50 m. de altura y sus bonitas filigranas hechas con ladrillo, resulta imponente.
"Tócala otra vez Sam"
   
El
mismo 30 de Noviembre al atardecer salgo para Casablanca a donde llego de noche. Aparco en una zona azul (mañana es sábado), y al día siguiente a las 8,20 de la mañana oigo un ruido extraño afuera: me asomo por la ventanilla y me están poniendo el cepo!. Le digo que me voy enseguida y consiente en quitarlo, pero me he librado por poco. Casablanca está ya asociada de por vida a la famosa película cuando los Europeos, los Franceses en este caso, eran los dueños de casi toda el África Occidental. Sus paseos al lado del mar son encantadores, y difícilmente
pudo encontrar Hassan I un lugar más a propósito para

 

 

 

construir la monumental mezquita, una de las mayores del Islam, que por otra parte parece un insulto a las humildes casas que tiene a su lado.
Marraquesh
    
Llego
al atardecer, aparco al lado de las murallas de la medina, y sin pensármelo 2 veces me encamino hacia el lugar mágico de esta ciudad: la plaza Jemaa-el-Fna. Fundada por los almorávides, a sido conquistada y
destruida varias veces pero siempre ha renacido incluso más esplendorosa, siendo su trazado medieval un bello ejemplo de la arquitectura de la época. La medina es muy grande, pero en este caso hay grandes calles que la cruzan y agilizan el tráfico. Me cuesta un rato llegar a la plaza, y al .entrar en ella me quedo asombrado de sus dimensiones. No es una plaza al uso con sus lados delimitados, y es

 

como si no respondiese a ningún trazado prefijado de antemano. Por sus dimensiones tal vez se podría comparar con la plaza de Isfahan, pero lo que la a hecho famosa es el
mundo que habita dentro de ella lleno de vitalidad y de vida; cuenta cuentos, curanderos, músicos, encantadores de serpientes, charlatanes, puestos callejeros de comida, vendedores de no se sabe qué etc. Ya es de noche y cada vez se ve más animación; la plaza está llena de lámparas de gas alrededor de las cuales se apiña la gente con caras unas veces de asombro, otras de incredulidad pero siempre atentos. La noche ayuda a incrementar ese mundo mágico al que la gente acude para soñar unas horas. Y a mí también me llega la hora de despertar: no he tomado referencias, me pierdo y al final decido tomar un taxi con el que a duras penas consigo llegar hasta donde está Ibiletxe. Al día

 

siguiente entro con Ibiletxe en la medina, y aparco al lado de la Koutoubia. Esta, emblema de la ciudad, junto con la torre Hassan y la Giralda de Sevilla son los 3 grandes minaretes construidos por los almohades a finales del siglo XII. Las 3 nacieron musulmanas pero en menos de 50 años la Giralda 
fue obligada a cambiar al bando cristiano. Voy otra vez a la plaza, y ahora durante el día son los músicos y los encantadores de serpientes los que más abundan. Pero la palabra, sobre todo por las noches, es la gran protagonista de la plaza, tanto en bereber como en Dariya, y me tengo que conformar con ver las ensoñadoras expresiones de los cuenta cuentos y de los espectadores.
Azt-Ben-Haddou
      Decido
ir hasta el inicio del desierto en Zagora, después daré marcha atrás hasta Ouarzazate, y de alli a Agadir en la

 

 

 

costa. Pero antes está este pueblo bereber, que junto con Fes y Marrakesh es también Patrimonio de la Humanidad.
Y en verdad que se lo merece: las poblaciones bereberes de la zona poseen un conjunto de edificaciones fortificadas llamadas Ksar, para guardar  los alimentos o refugiarse en caso de peligro. El de Azt-Ben-Haddou ha sido muy bien restaurado, y con sus torres y almenas de adobe parece una ciudad medieval en miniatura. Está atardeciendo, y los últimos rayos del sol iluminando la muralla aún realzan más su belleza.
Zagora
     
Estoy
acercándome a las estribaciones del desierto, y todo parece indicar que la poca vegetación desaparecerá pronto. Sin embargo al pasar un pequeño puerto de

 

montaña de repente aparece un oasis, grandes palmerales, y un pueblo y otro y otro, cada uno con su Ksar, mientras un río discurre entre ellos trayendo la vida y haciéndole frente al cercano desierto. Zagora es una pequeña y polvorienta ciudad, y en una de las salidas encuentro lo que he venido a buscar. Un gran mural en el que se puede leer: "A Tombuctu 52 días", que es lo que tardaban las caravanas de
camellos. Dirijo la mirada en esa dirección, y alla a lo lejos entre la arena, me imagino esa mítica ciudad que tendré la fortuna de verla en poco tiempo.
La costa: Agadir
     
Pongo
rumbo a Agadir a donde llego el 5 de Diciembre. Casi todo es nuevo, desde que en 1960 un gran terremoto destruyó prácticamente toda la ciudad. Sus

 

playas están muy animadas, con muchos Europeos que viven  aquí durante todo el año. La costa suaviza la temperatura, pues estas últimas noches han sido muy frías. La carretera está en muy buenas condiciones y voy todo lo rápido que me dejan los continuos controles policiales, pues me estoy acercando al Sahara Occidental.
Sahara Occidental
.- Cual es su profesión?-
Es la pregunta obligada que me hacen en todos los controles: no les importa si llevo o no los papeles en regla, pero sí están preocupados con que nadie que huela a
periodista pase por aquí. No quieren testigos incómodos que puedan contar la "limpieza étnica" que están haciendo en el Sahara. Por lo demás son amables aunque raro es el

 

 

 

que no pide el "cadeau" (regalo en francés).
     La costa es bastante agreste y esta llena de pequeños barracones hechos con plásticos y cartones que viven únicamente de lo que pescan. Probablemente sean Marroquíes que vinieron-trajeron al Sahara para suplir a los
autóctonos, y que ahora se encuentran sin trabajo y sin un lugar donde vivir: sus condiciones de vida parecen de lo más penosas.
La Aioun
      Capital
del Sahara, está a escasos 100 km de la frontera Marroquí (que hoy por hoy no existe). Situada cerca de la costa, es una pequeña  pero bonita ciudad, rodeada por el desierto. En 30 años todo vestigio del antiguo poder colonial (España) ha desaparecido, y  ha sido sustituido por el francés. Incluso la mayoría de la

 

población autóctona huyó o fue echada hace tiempo, siendo sustituida por Marroquíes. Quisiera preguntar sobre la situación actual, pero me consta que hay mucha policía de paisano, así que me quedo con las ganas.
A Mauritania
    Hasta la frontera Mauritana tengo unos 900 km. que los recorro en día y medio. La carretera está muy bien: a mi derecha sigo teniendo la  costa y a mi izquierda el desierto: todo un contraste. Al parar en Bir-Ganduz para tomar gasóleo le pregunto a una persona en francés
.- Cuanto falta para la frontera Mauritana?-.
.- Está a unos 30 km- me contesta en un castellano perfecto.

                     Costa entre Ceuta y Tánger
Por su cara es de por aquí, y le vuelvo a preguntar

 

extrañado:
.- Donde has aprendido tan bien castellano?-.
.-Aquí, soy Saharaui. Tuve que marchar a España cuando Marruecos invadió mi país, tengo pasaporte Español y ahora voy a La Aioun a visitar a mi tía que todavía vive allá-
Por fín y cuando ya desistía de ello puedo hablar con un Saharaui!
.- Cómo está la situación por aquí?-
.- Mal; a mí no me dicen nada porque tengo pasaporte
                                  Casablanca
Español, pero a la policía Marroquí no le gusta que los Saharauis andemos por nuestro país. Llevamos más de 15 años esperando que se celebre el referéndum pero la verdad es que tenemos pocas esperanzas de verlo-. me contesta con cierta tristeza.

 

 

 

Mientras ceno con él y 2 Marroquíes seguimos charlando de su azarosa vida, de cómo irá a los campamentos de Tirduf  a celebrar la fiesta del cordero con su familia, pero no le gusta le pregunte más sobre el Sahara: teme que los Marroquíes entiendan algo y le traiga problemas.
Al día siguiente 8 de Diciembre para las 10 de la mañana estoy en la frontera, pero los trámites son muy lentos: más de 2 horas y con el sol pegando fuerte. Salgo para
          Montañas del Atlas camino de Zagora
Mauritania, pero no hay ni carretera, ni indicaciones, así que sigo por intuición.
Adiós Marruecos
   
Llevaba
muchos años para visitarte, pero tu relativa proximidad lo ha ido retrasando. Para las muchas maravillas que atesoras ha sido una visita muy corta, pero me he podido hacer una idea de tu realidad. Ciertamente el salto

 

socio-cultural es mucho mayor de lo que podrían indicar esos escasos 20 km de separación de Europa: es como
llegar a otro mundo con unas formas de entender la vida muy diferentes. Pero no me parece bien que tengas un monarca que al igual que sus predecesores es poco menos que el amo del país; y además como se autoproclama descendiente de Mahoma, y por si fuera poco tiene el respaldo de la gran superpotencia pues haber quién se mete con él. Y por favor deja a los Saharauis que decidan su futuro, y no hagas más trampas llenando el país de Marroquíes para cuando te plazca hacer un referéndum amañado (si es que se hace algún día). Ellos tienen el respaldo de prácticamente toda África, pero es un respaldo meramente moral, mientras tú tienes el real de eso que eufemísticamente llaman "real politic" y también política de hechos consumados. Vamos que estás aterrorizando a todo

 

un país, pero como estás en el bando "correcto" pues se mira para otro lado: que pena!.
Ah, y haber si tus policías de carretera no son tan pelmas y dejan de estar parando continuamente a los forasteros para sacarnos algo con cualquier excusa!.
Por lo demás que te vaya bien.
Música
    
La
música originaria marroquí sería la berebere (más o

 

 

 

menos influenciada por la islámica), que tiene gran arraigo y popularidad (cantada fundamentalmente en Tamazight), y la música de origen árabe (cantada en Dariya: dialecto árabe-
            Cabras comiendo las hojas de un arbol
marroquí). He visto distintos grupos instrumentales: el Gembre (especie de Laúd de 3 cuerdas), acompañado de una especie de crótalos en cada mano, la ghaita (raita) acompañada con el tabal (tambor), y el bandir (tambor que se toca con ambas manos), grupos de 3-4 rebabs (especie de violín de una cuerda muy curioso).
La música bereber más famosa: jojouka, toma su nombre de un pueblo de las montañas del Rif, y por los años 60 se hizo popular entre algunos famosos músicos occidentales. Al parecer la música marroquí (entre otras), ha estado bastante influenciada por la llamada Andalusí, que es la que

   llevaron consigo a África los habitantes musulmanes del sur de la península expulsados por los cristianos. Todavía hay agrupaciones (compuestas fundamentalmente de rebab, ud, rabel y para la percusión de darbuka, pandereta y duff, tambor grande y estrecho) que interpretan música Andalusí. Por lo demás, en el mundo influenciado por el islam los cuartos de tono son muy importantes (en la música occidental no existen), y es lo que hace que un occidental pueda pensar que está "desafinando"

Sahara Occidental
   
Este
territorio fue colonizado por España a finales del siglo XIX, durante el gran reparto de África por los Europeos. En 1975 Marruecos aprovechó la debilidad política de España ante la cercana muerte de Franco para invadir el Sahara: unos 300.000 Marroquíes cruzaron la frontera y España abandonó a su suerte a los Saharauis. En 1976 se firmaron los acuerdos de Madrid, según los cuales
 

Marruecos y Mauritania se repartían el Sahara occidental. La reacción de los Saharauis no se hizo esperar, y el frente Polisario, a pesar de sus escasas fuerzas, invadió Mauritania llegando hasta cerca de Nouachott (la capital). Mauritania renunció a sus pretensiones anexionistas (al fin y al cabo ya tenía desierto para dar y regalar), y al principio el Polisario mantuvo a raya a Marruecos. Sin embargo la superioridad abrumadora de Marruecos les hizo retroceder hasta el desierto, y la gran mayoría de la población fue obligada a exilarse, viviendo sobre todo en el campo de refugiados de Tirduf (Argelia). En 1990 entablaron negociaciones Marruecos, el frente Polisario en representación de la población Saharaui, y la ONU para organizar un referéndum de autodeterminación, que fue ratificado en 1997
                    Con el joven Sahibi en Zagora
en el acuerdo de Huston. Sin embargo, a pesar de todas las

 

 

resoluciones de la ONU y de su consejo de seguridad en contra de la anexión  que de hecho ha realizado Marruecos, de las resoluciones del Tribunal Internacional de Justicia, del posicionamiento de la UA (unión africana) casi unánime sobre el derecho del pueblo Saharaui a su autodeterminación, Marruecos sigue incumpliendo sus compromisos, y sigue "repoblando" el país con Marroquíes. Seguramente no tendría una actitud tan prepotente de no

saberse respaldada por las grandes potencias, incluso España les ha dado la espalda, que sólo tienen buenas palabras para los Saharauis. El 10 de Abril del 2007 el Polisario presento una nueva proposición para la resolución del conflicto urgiendo a la celebración del referéndum, pero está claro que no hay voluntad por parte Marroquí, y me pregunto qué pintaban los 40 flamantes todo terrenos de la ONU que estaban estacionados enfrente del hotel Nagjir en

La Aioun. Los Saharauis ya están hartos de tanto engaño y dilación, que ante la pasividad mundial parece presagiar una entrega descarada y sin condiciones a Marruecos. Lo que está por ver es cual será la reacción del Polisario si esta entrega se produce



 DATOS  PRÁCTICOS SOBRE   Marruecos  


 

Visado                                : No se necesita.
Paso de Frontera               : Sin problemas, aunque lento, salvo los pelmas que te "pretenden ayudar" (a cambio de dinero claro).
Tasa de Salida                   : No existe
Automóvil                           : Exigen seguro y vale el Europeo (si no se tiene 14 días  60 E.). No hace falta CDP. Dan un documento para circular que hay que entregar a la salida.
Combustible/Gasolineras  : 0.74 E/litro. Bastantes gasolineras. A partir de Tarfaya (cerca Sahara O.) gasóleo casi a mitad de precio, para incentivar nuevos colonos Marroquíes.
Moneda                              :  1E.= 11,13 Dirhams. Curiosamente en la frontera el cambio mejor. Cambio en bancos; hay cajeros.
Carreteras                          : En buenas condiciones, incluso las secundarias.
Otros                                   : La policía es muy muy pelma, continuamente parándote por cualquier tontería para ver si saca unos dinares. La solución responderle (de buenas maneras) y esperar. Se conduce bien aunque ya es África y no es prudente hacerlo de noche por las bicicletas burros, carros etc. No hay problemas para aparcar en la calle (siempre que se sea discreto). Eso si, siempre hay alguien, incluso de noche, que se te acerca para decirte que es el guardián; no piden directamente y se les puede dar lo que se quiera ( o nada pero a veces vienen bien). Internet bien, barata y abundante. Las personas son amables, pero el pedir el "cadeau" está a la orden del día. El francés está muy extendido en todo el país. En algunas zonas del norte también el castellano. Se puede comer barato en la calle; en los supermercados es posible comprar cerveza u otro tipo de bebidas alcohólicas (aunque a veces lleva su tiempo).
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