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Crónica de : Jose E. Santacara
 

Crónica 45
Fecha: 2.005-IX-29
 
Kilómetros desde Carcastillo:  116.220
Transmitida desde :  Coro    (Venezuela)                                        Bolivia II Latitud   : 11º 23' N
Longitud: 69º 40' O

Por fin en Mérida Ibiletxe ha recibido sus nuevas medias suelas para los frenos delanteros y las piezas que tenía mal, con lo que el problema del freno está solucionado. La mala noticia es que me han vuelto a robar la cámara de fotos: ha sido en el centro vasco y precisamente se han aprovechado de que me confié y pensaba estaba en un lugar seguro: Sólo hay 3 personas implicadas, la policía ha intervenido pero al parecer una cámara no es suficiente motivo como para hacer grandes investigaciones. Enseguida pasaré a Colombia para ver la forma de embarcar e ir a Panamá, y lo más rápido que pueda a Guatemala (los Mayas), México y Cuba (pero sin Ibiletxe): espero que tenga suerte.


 

 


Reentrada en Bolivia
       El
10 de Julio vuelvo a entrar en Bolivia sin ningún problema: únicamente en la frontera un policía me pide "una colaboración", pero me sonrío le digo que no y no insiste.
La Paz
        Rápidamente me voy para La Paz y una vez allí me dirijo al mismo hotel: me ponen en una habitación con una pareja joven, a la mañana siguiente se van y al cabo de un rato entran en ella Carlos, Oscar y David que acaban de llegar de Rurenabaque (hay  que reconocer que el mundo no es tan grande para los que se quieren encontrar). Se echan a dormir pues han viajado durante toda la noche, y a la hora de la comida nos contamos nuestros respectivos viajes en las 3 últimas semanas: me interesan sobre todo la bajada en bicicleta desde La Cumbre a Coroico (3.500 m. de bajada continua), y la subida al Huaina Potosí de 6.080 m. de altitud.

 

Bajada La Cumbre- Coroico
         En
un jeep nos llevan a los 5 componentes de la expedición hasta los 4.700 m., y de allí hasta
Coroico que está a 1.200 m. de altitud. Agarramos nuestras bicicletas de montaña y al principio la carretera está asfaltada pero no podemos ir a tumba

 

abierta debido a 2 chicas que van algo lentas. Después comienza la auténtica aventura: entramos en la llamada "Carretera de la muerte", nos ponemos las mascarillas pues el polvo a veces no deja ni ver el camino, y ahora sí me voy detrás del guía. Con el manillar férreamente sujeto entre las manos los brazos en tensión y con un traqueteo continuo, vamos prácticamente saltando por encima de las piedras, parando de vez en cuando para esperar al resto y vuelta a empezar. Los precipicios son espectaculares en cuanto a hermosura y peligro, y si a esto añadimos que el tráfico de camiones es continuo, la aventura y el riesgo es total. Son "arto movilidades" (como dicen aquí) y bicicletas las que se despeñan al cabo del año y terminan estrellándose en el fondo del valle, cientos de metros más abajo. Ciertamente la carretera tiene bien merecida su fama de ser una de las más peligrosas del mundo. En Coroico nos espera una merecida ducha y una espléndida comida con derecho a repetir. Llego  a La Paz ya de noche, y El Alto se me

 

 

 

 

asemeja  un gigantesco anfiteatro con sus miles de bombillas como mudos y resplandecientes espectadores de lo que ocurre más abajo en el escenario de la ciudad de La Paz.
Huaina Potosí
       Al
día siguiente voy con el guía en taxi hasta el campo base a 4.700 m. para subir el Huaina Potosí; me dejan una mochila grande pues hay que llevar tienda, saco de alta montaña, botas de nieve, crampones etc. Me cuesta bastante llegar al campamento situado  a 5.130 m. donde se duerme y al día siguiente se sube el glaciar hasta la cima,
pues con la altura se hace difícil el respirar. Así que al llegar al denominado Rock Camp y a pesar de recuperarme enseguida, solo de pensar que me tengo que levantar a la 1 de la madrugada con una temperatura de 10 bajo cero y volver a sufrir con la respiración, se me empiezan a quitar las ganas. Sé que luego me arrepentiré pero decido volver a bajar al calor del refugio en el campamento base. Allí nos dedicamos a jugar a las cartas y me da una envidia terrible cada vez que llegan los 

 


                                 Segundo recorrido por Bolivia
que han hecho cumbre. Tenía ilusión por hacer un 6.000 pero veo se tendrá que quedar para otra vez.
Fiesta en La Paz

       Vuelvo el 15 de Julio, justo para celebrar la gran fiesta que conmemora el aniversario de su fundación en 1.548. La avenida principal 16 de Julio es un hervidero de gente, puestos de comida y bebida, todo el mundo se ve contento y dispuesto a divertirse, y Carlos, Oscar, David y yo hacemos lo propio. Resulta difícil caminar entre tanto gentío, pero en ningún momento da la impresión de inseguridad como me ha ocurrido en otras partes; los fuegos artificiales añaden más colorido a este ya de por sí bonito espectáculo. Da pena marcharse pero hemos quedado con Didac en una discoteca cerca de su casa; a la vuelta a las 5 de la mañana la fiesta en la avenida está concluyendo, y ahora sí que hay que tener un poco de cuidado con los muchos borrachos que quedan.
H
ora de partir
         Los
4 vamos hacia el norte, pero mientras Carlos, Oscar y David lo harán por Perú, Ecuador y Colombia, yo subiré por Bolivia hasta Brasil,

 

y atravesaré la amazonía para llegar a Venezuela. Estaremos en contacto y quién sabe, tal vez nos volvamos a encontrar en Venezuela de nuevo: casi nada es imposible en este viaje. El 18 de julio los veo partir con paso firme y sus mochilas al hombro calle
                      Fiesta en La Paz
abajo, y les deseo buena suerte por esta dolorida Latinoamérica que a veces da zarpazos al que menos se los merece. Yo me quedo un día más y al volver a la tarde veo la mochila de otra persona en la habitación:
.- Es un Israelita- me dice el encargado.
Me quedo un par de segundos pensando y le digo:
.- Por favor cámbiame de habitación-.
Sé que rompo uno de los principios del viaje: la solidaridad con todo el mundo, pero ya me ha tocado viajar con 2: en China y en Vietnam, y no aguanto más su prepotencia mezclada con un hipócrito victimismo deque el mundo no les comprende: antes que volver a discutir me marcho. En la nueva habitación hay un Camba: intercambiamos nuestros periódicos con visiones muy

 

 

 

distintas de la realidad Boliviana:
.- Cómo se ve el proceso Boliviano desde Santa Cruz?- le pregunto.

           Carlos, Oscar y David camino de Perú
- Aquí sobran unos cuantos millones de Indios- me contesta tan tranquilo.
.- Pues ellos estaban aquí mucho antes de que tus ancestros llegaran- le replico ya que tiene rasgos bastante occidentales.
Me da la callada por respuesta, y seguimos hablando de otros temas como si tal cosa; en Bolivia los debates políticos a veces funcionan así (si se le puede llamar a esta respuesta debate político).
Hacia Guayaramerín-Brasil
       Tengo
un poco de prevención por cómo encontraré la carretera-camino, pero la decisión está tomada: hoy 19 de julio empiezo la última ruta por Bolivia que me llevará hasta Brasil y será: Coroico, Rurrenabaque, Riberalta y Guayaramerín. La época de las lluvias ha terminado y eso espero facilitará el viaje.

 

Coroico
      Voy
bordeando la cordillera imperial rodeado de majestuosas cumbres, por una carretera impresionante y de momento en buenas condiciones. Cuando empiezo a bajar hacia Coroico un espectáculo irreal se ofrece ante mis ojos: un blanco mar de nubes entre las que asoman pequeños picachos que
asemejan islas. Me sumerjo en él, y ya de noche la carretera desaparece: entro en la "Carretera de la muerte" que ya recorrí en bicicleta.
.-Tienes mucho valor para andar por estos caminos de noche; muchos chóferes Bolivianos no se atreven ni de día- me dice el chofer de un microbús en una de las muchas paradas que hay que hacer. Y es que efectivamente como no caben 2 vehículos a la vez y tienen preferencia los que suben, a veces hay  que retroceder hasta 200 m. y aparcar en algún hueco al borde del precipicio. Coroico tiene un clima benigno, y duermo confortablemente en la misma plaza colonial del pueblo.
Tocaña
      El
año de 1.992, en el pueblo de Mururata no lejos

 

de Tocaña,  durante las fiestas de San Benito y siguiendo la tradición fue coronado simbólicamente Julio Pinedo como rey de los negros, según  una legitima línea de sucesión monárquica venida directamente de África. En 1.795 fueron traídos los primeros esclavos negros a esta zona, y hoy ya libres se dedican al cultivo de la hoja de coca y productos del campo. Tocaña está cerca de Coroico, y es muy curioso ver a mujeres negras como el azabache vestidas de cholitas (collas). De sus ancestros conservan sus ritmos Africanos que han dado origen a la Saya y Caporales; sus típicas músicas y danzas también muy populares entre los collas. En la gasolinera de Caranavi hay un foso para coches y meto a Ibiletxe en él. Llevo un ruido extraño en una rueda trasera y veo que se ha desprendido el protector metálico del disco del freno y gira libremente dentro de la rueda: perfectamente podía haber cortado el tubo de goma del freno, y de haber
                             Paisaje en las Yungas
ocurrido en la "Carretera de la muerte" Ibiletxe seria una más de las "arto movilidades" despeñadas.

 

 

 

Rurrenabaque
       Me
desvío a la derecha en dirección a Rurenabaque y entro en las preciosas Yungas Bolivianas: es una selva continua con palmeras, platanares, lianas y unos árboles especiales de tronco delgado y desnudo que en la punta se ramifican en varias ramas con hojas, a modo de un paraguas. La carretera-camino es surrealista: es de tierra con grandes surcos ya casi secos efecto de las lluvias pasadas, y la conducción se hace a ratos por la derecha y a ratos por la izquierda, según criterios que no alcanzo a descifrar. Me limito a ir por el lado contrario del que me viene enfrente, y menos mal que hay poco tráfico. Rurre está ya en la cuenca amazónica (que ocupa más de media Bolivia), y aunque como tal no tiene ningún atractivo es uno de los lugares a visitar en Bolivia por ser el punto de
partida para ver la espléndida fauna y flora de la zona, hacer trekines por la selva, y sobre todo explorar el Parque Nacional del Alto Madidi, declarado por la Unesco reserva de la biosfera.  Estoy con Didac y su madre que está de visita en Bolivia: acaba de abrir

 

una agencia turística en Rurre, y si venís a Bolivia no dejéis de contactar con él, pues estoy seguro quedareis ampliamente satisfechos con sus paquetes turísticos, ya que  tiene una amplia experiencia de años en estas cuestiones. Su email es:
fotodidac@gmail.com  (no tengo el de la agencia).
A Guayaramerín
       En
la cuenca amazónica el calor se hace notar cada vez más; el paisaje ha cambiado totalmente, con una vegetación no muy densa y en las pequeñas
                           Poblado aborigen
lagunas  a ambos lados del camino en la gran llanura que estoy atravesando se ven hermosas aves y pequeños yacarés (caimanes). Esta es la tierra de los pueblos aborígenes Chiman-Mosetén, Esseja y Tacana: incluso en el Parque Nacional Alto Madidi pueden seguir con su ancestral sistema de vida. El otro ruido que llevo desde hace algún tiempo en la rueda delantera izquierda cada vez va a más debido a las malas condiciones del camino, (y sobre todo la horrible "calamina":  ondulaciones en el camino al

 

estilo de las que había en Australia y sobre las que se debe de circular rápido, pero al llevar los amortiguadores deshechos tengo que ir despacio por lo que es un traqueteo continuo. Nada más pasar Sta. Teresa de Yacuna ocurre lo que me temía: el maltrecho muelle que sujeta la pinza de las zapatas de los frenos se acaba por romper, después lo hacen los pernos de sujeción y la pinza se queda suelta. Salgo de la carretera y me quedo un rato sin saber qué hacer: estoy sólo en esta inmensidad, sin apenas tráfico, son cerca de las 4 de la tarde y el siguiente pueblo importante (Guayaramerín) está a más de 300 Km. Al final pienso que la única solución es quitar la pinza, clausurar como pueda ese freno, y seguir con los otros 3 hasta que pueda hacer algún apaño y volver a ponerlo en funcionamiento; casualmente pasa un
                       Camino de Guayaramerín
camionero Boliviano, se para y me ayuda. Dado que ando  despacio no se nota que vaya con 3 frenos, y además me he librado del ruido que llevaba en esa rueda. Paro a cenar y dormir en un caserío aislado

 

 

 

donde los jóvenes ganaderos de la zona no paran de beber cervezas, y la escena es de lo más curiosa y evocadora. Por fin el 25 de Julio llego a Guayaramerín, última ciudad Boliviana antes de Brasil: encuentro un
            Puesta de Sol cerca de Guayaramerín
taller donde me hacen los pernos y las arandelas de goma perdidas, un muelle casero, y otra vez a la carretera aunque intuyo que el apaño no durará demasiado. Desde la aduana veo al otro lado del río Brasil, al que pasaré mañana 27 de julio.
Adiós Bolivia
      Vine
para una semana y al final he estado contigo más de un mes, pero no me arrepiento pues eres de esos países que dejan huella. Eres el lugar donde más me he sentido en Suramérica, sobre todo con tus collas, quechuas y aymaras, a los que he aprendido a querer y respetar. La parte negativa es que te dejo en una situación muy convulsa; son demasiados problemas a resolver poco menos que a la vez, pero donde no se vislumbran bien las personas  capacitadas para dirigir el proceso. Son los sueños de tus gentes que han esperado pacientemente para realizarlos, y que ahora creen

 

llegado el momento: la nueva frustración de ellos podría dar lugar a situaciones violentas de imprevisibles consecuencias (las últimas encuestas dan como ganador de las elecciones de Diciembre al líder del MAS Evo Morales carismático revolucionario proveniente del movimiento campesino colla). No creo que la nacionalización de los  hidrocarburos sea lo que más te convenga, pues esto te acarreará un boicot por parte de las transnacionales (de hecho ya ha empezado), y haber de dónde vas a sacar el dinero para el desarrollo de esa industria. Pero entiendo la sensibilidad hacia el tema de los que reclaman dicha nacionalización, hartos de ver cómo durante los últimos 450 años las entrañas de tus montañas han sido vaciadas y tus riquezas expoliadas  para beneficio de extraños y de tu oligarquía criolla.
                                 Danzas en La Paz
Te deseo mucha mucha suerte en las duras  negociaciones que se te avecinan, y que la silla de oro en la que supuestamente te sientas sea de verdad acomodo para todos tus habitantes. Tu hora ha llegado.

 

Música
       En
el tema musical también Bolivia está en el ojo del huracán, pero esta vez se trata de un huracán pacífico. Su genuina música andina ( la más extendida aunque en Bolivia existen muchos otros pueblos aborígenes con sus particularismos), si bien se mantiene  en algunas zonas  más o menos pura está bastante influenciada por las músicas peninsulares-
europeas; incluso a veces la música puede ser tocada totalmente con instrumentos peninsulares como guitarras, bandurrias, mandolinas o el charango. Es curioso cómo para cantar se utiliza mayoritariamente el castellano, o a veces en la misma canción (los huainos) se mezclan el castellano-quechua o aymara. En el sur la influencia Argentino-Chilena es grande, y las cuecas, chacareras y cacharpayas son muy populares: incluso hay tunas (no sólo estudiantiles). Más hacia el norte y sobre todo en La Paz la influencia del norte se deja sentir, y es normal escuchar salsa, merengue, cumbia, ballenato etc. En el Oriente la música Brasilera parece tener bastante influencia, pero no lo he podido constatar por no haber estado. La variedad musical es muy grande, y

 

 

es sobre todo en los carnavales donde se muestra en todo su esplendor: morenadas, diabladas, caporales, , sayas (la que más se identifica con los negros Bolivianos pero su influencia es grande en otras también), tinkus, huainos etc. A veces son interpretadas únicamente con instrumentos occidentales como: trompetas, bombardinos, trombones, clarinetes etc. Los instrumentos autóctonos por excelencia son la

zampoña y la quena que tienen una variedad casi infinita, con instrumentos que a veces superan los 2 metros de largo.

 
                       Carretera de la muerte
 

Las músicas son una canción popular aborigen (creo que en Aymara), y una saya de los negros al norte de La
                            Cuenca amazónica
Paz.

 

    DATOS  PRÁCTICOS SOBRE:  Bolivia     

Esta sección será una actualización de datos prácticos que se pueden encontrar, y muy completos, en la web Ruta de los Imperios:
 
www.ruta-imperios.com 

Visado                                :  No hace falta.
Paso de Frontera               : Sin problemas. A veces piden la colaboración pero sin insistir.
Tasa de Salida                   : No hay, pero a veces con la excusa de cobrar tasas por entrada en pueblos podrían intensar sacar algo.
Automóvil                           : Hacen un documento de importación temporal y no es necesario el CDP. El seguro es el mismo que el de Mercosur, no lo exigen pero no viene mal tenerlo.
Combustible/Gasolineras  :   1l. = 372 Bolivianos (gasoil).   Hay gasolineras suficientes aunque algunas en bastante malas condiciones
Moneda                              :   1$= 8,10 Bolivianos. Hay muchas oficinas de cambio y cambistas en la calle; también bastantes cajeros. Los traveles a veces difícil de cambiar.
Carreteras                          : Desde Desaguadero (frontera con Perú) hasta Sucre en perfectas condiciones. A partir de ahí sálvese quien pueda: al parecer alrededor de Santa Cruz hay tramos buenos, y la de Potosí- Villazón (frontera con Argentina) está en construcción pero al ritmo que van podría estar para el siglo que viene: no la veré. Lo curioso es que hay que pagar peaje en todas ellas aunque sea peor que un camino de cabras. Un camionero me dijo en Guayaramerín que llevaba 40 años pagando supuestamente para hacer la carretera pero que nadie sabía a dónde iba a parar el dinero: desde luego a las carreteras no. Policía en carretera correcta y amable ( no intentaron sacarme nada en ningún momento).
Otros                                   : País bastante más seguro de lo que se dice, sin olvidar que estamos en Latinoamérica. Con las debidas precauciones se puede aparcar a dormir en los pueblos (buscar el lugar apropiado), sin ser molestado. Comida muy muy barata: tal vez el país más barato que he visitado: en La Paz comíamos y cenábamos por un Euro !! (ambas incluidas). Gente amable, incluidos los collas que enseguida les sacas una sonrisa. Internet abundante y muy barata. Un paraíso para comprar CDs, DVDs (películas), colecciones enteras de músicos famosos a precios ridículos. Como anécdota curiosa me olvidé la tarjeta en un cajero, me di cuenta en Perú, y a la vuelta al cabo de un mes la recuperé!. Conducción algo anárquica, así que andar con cuidado.
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